Cheese strawberry cupcakes

Después de muuuuuuuucho, mucho tiempo al fin os traigo una receta. Aunque parezca imposible soy un novato con los cupcakes, es algo que me fascina pero en lo que aún no había entrado con detenimiento y, al que diga que es una magdalena lo meto directamente en la Kitchen Aid y le pego cuatro vueltas jajaja, la verdad es que tienen mas ciencia de lo que parece, hay cientos de recetas diferentes tanto para el cupcake como para la crema y, aunque yo me dedico casi cien por cien al fondant,  prefiero los cupcakes de crema, tal vez sean menos vistosos, pero a mi me resultan deliciosos.

Y en pleno proceso experimental  hoy os traigo una receta que me ha encantado, cupcakes de queso y fresa, o si lo preferís mas internacional "Cheese strawberry cupcakes". El sabor me recuerda muchísimo a la tradicional tarta de queso con confitura de fresas, ha sido un descubrimiento.

Vamos con la receta.

INGREDIENTES:

Para los cupcakes (con estas cantidades me han salido 18 cupcakes).
- 150 gr de mantequilla sin sal
- 200 gr de azúcar
- 60 gr de queso crema
- 4 huevos
- 120 ml de leche
- 200 gr de harina
- 1 cucharadita y media de levadura en polvo, unos 7 gr.
- 1/2 cucharadita de esencia de fresa, unos 3 gr. (esta medida es variable y depende de lo concentrada que sea la esencia que utilicéis).

Para la crema:
- 75 gr de mantequilla
- 100 gr de queso crema
- 1/2 cucharadita de esencia de fresa.
- 1 cucharadita de cremor tártaro (opcional).
- 350 gr de azúcar glas.

- Sirope de fresa para el relleno.

PREPARACIÓN:

Es muy importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente.

Recomiendo utilizar una batidora con bastante potencia, en mi caso utilizo la Kitchen Aid con la pala plana, pero podéis utilizar cualquier otro tipo de batidora eléctrica.

Para la realización de los cupcakes colocamos en el vaso de la batidora la mantequilla y el queso con el azúcar y batimos durante unos minutos a velocidad media-alta hasta formar una crema homogénea.

Añadimos los huevos de uno en uno, no añadiremos el siguiente hasta que cada uno esté completamente integrado en la masa.

Disolvemos la esencia de fresa en la leche y reservamos.

Mezclamos la levadura con la harina y tamizamos.

Añadimos 1/3 de la harina a la mezcla y batimos a velocidad media-baja, cuando esté integrado agregamos la mitad de la leche con la esencia. Repetimos este proceso siempre esperando a que cada ingrediente se integre perfectamente. Los cinco pasos serían harina, leche, harina, leche y harina, siempre comenzamos y terminamos añadiendo harina.

Removemos finalmente con una espátula mediante movimientos envolventes hasta que la mezcla sea totalmente homogénea.

Colocamos la mezcla en nuestras cápsulas rellenando aproximadamente los 3/4 de su capacidad y colocamos en el horno precalentado a 180º durante unos 15-20 minutos.

Una vez sacados del horno los dejamos reposar unos 5 minutos y los colocamos en una rejilla para que se enfríen.

Para la realización de la crema colocamos la mantequilla con el queso en el vaso de la batidora y batimos a velocidad alta durante unos minutos hasta conseguir una crema homogénea de color claro. Añadimos la esencia y seguimos batiendo.

Mezclamos el azúcar glas con el cremor tártaro y tamizamos.

Paramos la batidora y añadimos el azúcar glas tamizado, en este momento os recomiendo que tapéis la batidora con un paño limpio y húmedo o se os creará una nube de azúcar al comenzar a batir :).

Comenzamos a batir a velocidad baja para que el azúcar se integre, en menos de un minuto podréis retirar el paño, seguimos batiendo aumentando la velocidad hasta llegar a velocidad alta durante unos minutos hasta conseguir una mezcla lo mas cremosa posible.

Yo le he añadido una gota de colorante rojo para darle un color rosa más vistoso, pero esto es completamente opcional.

El resultado final de la crema ha de ser algo parecido a esto:

Rellenamos nuestros cupcakes con sirope de fresa, para esto podemos ayudarnos de un descorazonador de manzanas, perforamos el cupcake, rellenamos, volvemos a tapar y listos para decorar. Yo he utilizado una boquilla 1M, archiconocida, ya sabéis que podéis conseguir dos efectos, el efecto "copete" clásico de cupcake girando desde fuera hacia dentro o la famosísima "rosa" girando de dentro hacia fuera.

Y este ha sido el experimento de hoy, espero que lo probéis y me contéis.

Por cierto, como sabéis ya he vuelto del curso de Londres, ha sido fantástico, espero poder buscar un rato  y haceros un post para contároslo todo, aún tengo que organizar mis fotos que tengo muuuuuuchas... pero eso será otro día.

Abrazos.